Como Tu vida en 65 minutos, sin ir más lejos (a la que le une la muerte o la casualidad como ideas argumentales), esta podría ser, se me ocurre a bote pronto, una de esas películas generacionales que, salvando las distancias, queda impresa en la memoria como La guerra de las galaxias o... bueno, alguna más (si la hubiere, claro)... lo que quiero decir también es que se nota que el señor Saadia, un muchacho mejicano al que algún loco temerario le ha producido esta superficial historia (destinada a ser un buen cortometraje pero que se diluye en las respetuosas dimensiones de un largometraje), está más interesado en hacernos creer que es un tipo muy leído (no todo el monte es Kundera) y que la película le ha salido sosita (como dice que es Scarlett Johanson mi amado amigo Coque). Con unos títulos de créditos iniciales prometedores y nada habituales en el anodino repertorio estético del cine español y la inclusión de varias secciones de animación a lo largo del metraje, 3:19 adolece, como decía, de intentar dilatar lo que no da para más que un agradable y curioso corto. Diría que le sobra prácticamente la primera mitad, y que, si las partes de animación se eliminaran no perderíamos gran cosa. Añadamos la mediocre interpretación de los actores (todos, sin excepción) y algunos diálogos insoportables y sabremos la razón de que en el cine sólo hubiera dos personas viendo la película... debería aclarar que una de esas personas era yo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario