sábado, 18 de diciembre de 2010

Bon appétit, de David Pinillos


No hay mejor ejemplo de historia comprada en el Carrefour que este. Personajes que son clichés, situaciones repetidas hasta la saciedad, estructura convencional (es decir, previsible), diálogos desempaquetados de otras películas, niña mona que al parecer desconoce los métodos de planificación familiar, niño mono (si no se le mira de frente, menuda quijada tiene el Ugalde), videoclip con tópica tonadilla de Sigur ros, en fin, el mostrador completo de la sección "Hágase su propia comedia romántica" del supermercado de la esquina.

2 comentarios:

  1. Hijo mío, qué barbaridad! te has despachao agusto... Yo creo que una película en la que salga Ugalde ya merece la pena, ja!

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  2. Yo a mí me parece que la carne de reno te está afectando, y los de Cineclub-gay reprobamos tus gustos.

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